Alebrijes
Los alebrijes son originarios de
Oaxaca, más exactamente de San Antonio Arrazola. Por supuesto, no podía
perderme la ocasión de conocer un taller en ese lugar, al que resulta
difícil accesar a través de caminos de terracería y señalización
escasa.
¿Qué
son los alebrijes? Son figuras de madera tallada que representan seres
imaginarios, algunos mezcla de diferentes animales, especies, reales y
fantásticos.
Hay
varias versiones en torno al origen de estas criaturas. Algunos le
atribuyen el invento a Pedro Linares López en 1936, que enfermo, soñó
estar en un bosque rodeado de estos seres que lo conducían a la
consciencia y le gritaban: "¡Alebrijes, alebrijes!". Al despertar y
recuperarse, dedicó su vida a la creación de estas figuras, haciéndose
merecedor del Premio Nacional de Ciencias y Artes 1990.
Otra
versión le atribuye la creación a Manuel Jiménez, que antes de
inventarlos se dedicaba a tallar máscaras en madera. Los aldeanos dicen
que este personaje bebía frecuentemente y que en una borrachera tuvo el
sueño que dio origen a los alebrijes.
En realidad, sea cual sea la versión original, ambas han dado lugar a una de las mayores expresiones de arte popular mexicano.
En el taller que visité nos explicaron el proceso de elaboración detrás de estas piezas:
Todo
inicia en el valle de Oaxaca, donde se cultiva el arbusto llamado
copal, que da la madera tan manejable y suave que permite crear esas
figuras. Los artesanos trabajan la madera antes de 8 días de talado el
árbol para evitar que se seque y endurezca. Los diseños empleados son
plantas o animales fantásticos producto de la imaginación del artesano o
de alguna petición hecha. El tallado y pulido se hacen a mano. Algunas
figuras son muy grandes y requieren ser armadas con varias piezas, para
lograr así el efecto deseado. Una vez pulida la figura, se pinta con
acrícilico manualmente. Todo esto permite que ninguna pieza sea igual a
otra, dándole mayor misticismo al alebrije.
Hace poco visite el Museo de Arte Popular,
en la Ciudad de México. Ahí, da la bienvenida al visitante un enorme
alebrije que además sirve como introducción a la sala de exhibición "Lo
Fantástico", teniendo como protagonistas a los alebrijes, claro está.
Místicos, mágicos, coloridos, fantásticos, a veces tenebrosos y a veces graciosos, los alebrijes son parte del acervo cultural mexicano.
¿Qué opinan? ¿Les gustan o disgustan?
¿Qué opinan? ¿Les gustan o disgustan?
Muy interesante, me encanta, muchas cosas que yo no sabia. Gracias.
ResponderEliminarMe alegro que te gustara.
EliminarGracias por pasarte por aquí.
excelentes creaciones, gracias lucy por dar a conocer las artesanías mexicanas al mundo.
ResponderEliminarGracias por tus siempre amables comentarios, LTG.
EliminarY efectivamente, son excelentes creaciones las de los artesanos oaxaqueños.